PÁGINAS

viernes, 17 de diciembre de 2010

Un niño hospitalizado tras ahorcarse en Picón del Jarama

Ha vuelto a ocurrir. A pesar de las incesantes denuncias. A pesar de los informes del Defensor del Pueblo y de Amnistía Internacional. A pesar de las movilizaciones. Las violaciones de los derechos de los niños no han cesado, y la desesperación de algunos de ellos vuelve a tener efectos terribles. Ayer lunes 13 de diciembre de 2010 un niño de 14 años volvió a intentar quitarse la vida en el interior del centro de menores Picón de Jarama. Según informa su madre, se trata del segundo intento en un mes, y en estos momentos se encuentra hospitalizado en el hospital Gregorio Marañón, de Madrid. A Marisa, su madre, no se le ha permitido verle todavía, y según fuentes del hospital, el director de Picón de Jarama (Juan Carlos Rodríguez Crespillo) habría dado orden de impedir cualquier visita. Por este motivo, desconocemos en qué estado de salud se encuentra el niño ahora mismo.
Desde esta web, venimos siguiendo el caso de este adolescente desde hace tiempo, y hemos podido comprobar como los derechos del niño han sido violados sistemáticamente, desoyendo además los desesperados intentos de su madre, por buscar ayuda ante los malos tratos que el adolescente decía sufrir en Picón de Jarama. Marisa lleva tiempo advirtiendo de que su hijo estaba desesperado. Incluso el propio niño había escrito una carta pidiendo a su técnico de tutela que le sacase de Picón de Jarama porque no aguantaba más.
Puedes escuchar una entrevista realizada a su madre antes del intento de suicidio aquí: http://lossonidosdemibarrio.podomat...
El niño se encuentra tutelado por la Comunidad de Madrid debido a la situación de su familia. Marisa es una mujer divorciada que trabaja 7 días a la semana y tiene además un hijo diagnosticado con TDAH. Según el Instituto Madrileño del Menor y la Familia, las dificultades qufamiliares, sumadas a su situación laboral, le impiden cuidar de ellos. Por este motivo, sin respetar la opinión de los niños ni la de Marisa, se los entrega a dos empresas privadas que reciben (empleando los cálculos del defensor del Pueblo) alrededor de 3.600 euros mensuales por cada uno de ellos. Los niños están ubicados a decenas de kilómetros uno del otro, y el niño que intentó suicidarse ayer sufría además las condiciones carcelarias de Picón de Jarama.
Esperamos que sea suficiente leer la carta del niño, escrita de su puño y letra en agosto, para que quienes leeis estas líneas os animéis a actuar contra la impunidad que rodea todos estos casos. Muy pronto se anunciarán movilizaciones.

Extraído de www.centrosdemenores.com