PÁGINAS

viernes, 17 de agosto de 2012

No al acoso contra las organizaciones sociales y de izquierda en la Feria de Málaga


En la pasada madrugada del domingo 12 de este mes de Agosto, el Partido Popular, a través del Ayuntamiento de Málaga, ha dado un nuevo paso en el acoso y persecución contra las organizaciones sociales y de la izquierda que denunciamos la catarata de ataques y recortes de derechos que ha protagonizado el gobierno del PP desde su llegada al poder.
Si hace unos días se daban a conocer por parte de la asociación de consumidores FACUA las amenazas de ilegalización contra este colectivo por hacer una campaña contra los recortes en la sanidad y educación públicas, en la noche del domingo le toco el turno de ser víctimas de estos intentos de censura y persecución política a los compañeros del Sindicato de Estudiantes y El Militante.
En concreto la concejalía de cultura ha sancionado a estas dos casetas por tener como decoración de sus portadas fotografías de la Marea Verde, los mineros en una de sus marchas contra los recortes y  otra del Ché Guevara.
¿¡Puede haber una censura más descarada y burda contra nuestros derechos fundamentales a la libertad de expresión y organización?! ¡Esta es la democracia del PP! Todo para los ricos, poderosos y especuladores y represión y censura contra jóvenes, trabajadores y sus organizaciones ¡No lo vamos a permitir!

Esta sanción es un atropello contra los derechos que tanto costaron arrancar en la lucha a millones de jóvenes y trabajadores anónimos. Una sanción que deja ver una escandalosa persecución política contra los que hoy nos vemos obligados a luchar para defender nuestras condiciones más elementales de vida frente a los brutales recortes que el gobierno del PP nos está imponiendo: algo inadmisible.
Pero además de denunciar este inaceptable recorte de derechos democráticos, las organizaciones firmantes de esta hoja queremos sumar  a la denuncia contra esta vulneración de derechos colectivos fundamentales que nos afectan a todos otro atropello más: el abandono que, por parte del  Ayuntamiento, se viene haciendo, apelando a la austeridad, de la organización de la Feria. Esto se ha concretado en el descuido de aspectos fundamentales como la seguridad así como la ayuda a los colectivos, peñas, asociaciones y organizaciones que hacen de la Feria una fiesta sana, popular, participativa y democrática. Si la Feria de Málaga continúa manteniendo unas determinadas condiciones es por la labor desinteresada y enérgica de cientos de trabajadores y jóvenes que son los peñistas, afiliados y simpatizantes, que nutren el tejido asociativo malagueño que se vuelcan para tratar de suplir las deficiencias cada vez más alarmantes que esta concejalía lleva a cabo. Algo que choca cada vez más y contrasta claramente con los tratos de favor a los grandes empresarios de la hostelería, a los que se les entregan los mejores emplazamientos, se le dan todas las facilidades y no en pocas ocasiones se mira hacia otro lado con las numerosas y reiteradas prácticas dudosas con el cumplimiento respecto a las normas de la Feria, facilitando así la degradación de unas fiestas que tendrían que ir dirigidas para el disfrute de todos los malagueños, especialmente en un momento de grave crisis económica que hace más difícil la participación popular en la misma de los jóvenes y trabajadores golpeados por una crisis que no hemos creado y que el gobierno quiere hacernos pagar.
Lamentablemente este acoso no es nuevo para nosotros. De esta forma los compañeros de UGT y CGT, entre otros, han tenido que soportar denuncias  que nada tienen que ver con la realidad, en las que se les acusaba de lo que sí son prácticas habituales en otro tipo de casetas conocidas por todo el mundo,  en las que se vende alcohol a menores, no se guardan las medidas de seguridad, etc. Algo que, aunque no suceden en las casetas de la izquierda, se ha utilizado en varias ocasiones como excusa para multarlas o incluso cerrarlas, como así le sucedió en ediciones pasada a las casetas de CCOO, CGT y Juventudes Comunistas.
Sin duda es el intento de asfixia económica una parte fundamental de la motivación para llevar adelante estas actuaciones contra nuestras organizaciones. La derecha cree que con esta persecución podrá evitar que centenares de miles de jóvenes y trabajadores volvamos a salir a la calle desde los primeros días de septiembre a defender la sanidad y la educación públicas, así como realizar movilizaciones multitudinarias contra todas las políticas de recortes y agresiones que ha puesto encima de la mesa el gobierno del PP.
Es por eso que los firmantes de este manifiesto queremos dejar claro una vez más nuestro compromiso en la lucha por unas fiestas populares, democráticas, participativas y con las mejores condiciones en la ciudad de Málaga. Algo que pasa por la denuncia activa de todas las irregularidades, tratos de favor y atropellos que se suceden a manos de la actual corporación de este Ayuntamiento y que ponen en peligro con toda claridad la participación de sectores sociales cada vez más amplios en nuestra ciudad.
¡No al acoso y la persecución política de quien defiende la sanidad y educación públicas!
¡Basta ya de criminalizar a jóvenes, trabajadores y sus organizaciones!