Los agentes acudieron al piso de los padres del adolescente para recoger y devolver al joven, que está en situación de desamparo, a un centro de internamiento.
Cuatro policías nacionales y un adolescente esposado que estaban atrapados en un ascensor fueron rescatados por los bomberos en Vigo. El elevador quedó atascado por el exceso de peso de los cinco ocupantes y por los movimientos del menor, que intentaba zafarse. El incidente ocurrió a las 23.30 horas en el número 62 de la Avenida do Fragoso. Los agentes acudieron al piso de los padres del adolescente para recoger y devolver al joven, que está en situación de desamparo, a un centro de internamiento. El menor pretendía entrar en la casa de sus progenitores, pero no había nadie y golpeó la puerta repetidamente. Cuatro agentes redujeron al adolescente y lo esposaron.
Según explica la policía, el joven no fue detenido sino que los agentes tenían previsto acompañarlo de vuelta al centro. Una vez dentro del ascensor, el esposado se revolvió. «Hizo los movimientos típicos para zafarse, estaba nervioso, pero no es ningún delincuente», aclararon fuentes policiales. Con exceso de peso, el ascensor quedó atascado en la planta baja y las puertas bloqueadas. Los atrapados pidieron ayuda por emisora y los bomberos de Balaídos abrieron el elevador con llaves especiales. Nunca vieron algo similar.
La Voz de Galicia
NOTA: Esta noticia pone de relieve lo que entienden las autoridades por proteger a un niño. Y lo poco que parece interesarles la investigación a algunos periodistas (solo aparece lo explicado por "fuentes policiales").
Al parecer, si eres menor de edad y las autoridades han decidido declararte en desamparo (sea realidad o no), lo que puedes esperar es que te separen de tu familia y tu entorno (quieras tú o no) para internarte en un centro con tu permiso o sin él. Y si se te ocurre algo tan perverso como "fugarte" (¡vaya palabra para un niño que se va de donde dicen que le protegen!) para ir a ver a tus padres, la policía irá a buscarte y te llevarán por la fuerza de vuelta al centro en el que no quieres estar. Supongo que los niños en situación de desamparo son tan peligrosos que tienen que ser reducidos (¡!) y engrilletados por cuatro agentes de policía. La sensibilidad de los agentes queda reflejada en lo siguiente: si cuando los bomberos les rescataron el chaval seguía esposado ¿cuánto tiempo estuvo así inmovilizado? ¿Tan peligroso era que cuatro adultos entrenados no eran capaces de controlarle dentro de un ascensor sin estar engrilletado? Alucinante, pero la realidad supera la ficción...