Basta de represión y criminalización contra los que luchan. ¡Inmediata puesta en libertad de Andrés Bódalo!
La
detención y entrada en prisión de Andrés Bódalo, miembro de la
dirección nacional del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) y
concejal por Podemos en Jódar (Jaén), supone un nuevo hito en la
escalada de represión que desde las instancias del Estado se está
llevando a cabo contra todos aquellos que se atreven a levantar la
bandera de la lucha contra las injusticias, a las que cada vez en mayor
medida el sistema capitalista nos somete.
Andrés es
injustamente acusado de agredir en el año 2012 al teniente de alcalde
del PSOE en el ayuntamiento del municipio andaluz de Jódar durante una
concentración ante el consistorio en protesta por la insoportable
situación de paro que asola la comarca y los recortes al subsidio
agrario, el cual supone la única tabla de salvación para muchos
desempleados y sus familias. Ninguno de los vídeos grabados por la
policía, la Guardia Civil o los propios activistas muestran ese supuesto
acto violento, muy al contrario en todo momento Bódalo trató de calmar a
las personas que allí se estaban manifestando. Esto fue corroborado por
los mismos guardias civiles que testificaron durante el juicio, los
cuales declararon no haber visto en ningún momento a Andrés Bódalo
cometer ninguna agresión. A pesar de la evidente falta de pruebas, la
Audiencia Provincial de Jaén, presidida por el magistrado Pío Aguirre,
vocal del Consejo del Poder Judicial apoyado por el Partido Popular,
condenó a Andrés a tres años y medio de prisión y una multa de 1.800
euros por un delito de atentado contra el teniente de alcalde de una
corporación municipal.
A Andrés
no se le sentencia por haber cometido ningún supuesto delito sino por
ser un reconocido sindicalista y miembro de Podemos, cuyo único crimen
ha sido estar siempre en primera línea en defensa de los derechos de los
trabajadores andaluces. Contra él se aplica la misma injusticia que con
el joven vallecano Alfon, condenado a 4 años de prisión por su
participación en la huelga general de noviembre de 2012, o de tantos
otros sindicalistas sobre los que siguen pendiendo cuantiosas multas y
peticiones de penas de prisión. Con todo ello se pretende asustarnos
para que todos los jóvenes y trabajadores seamos conscientes de que la
participación en huelgas, manifestaciones y otras protestas pueden
llevarnos a sufrir sanciones económicas o penas de prisión.
La
criminalización de la protesta social no es más que la continuación, en
el terreno legal de los planes de austeridad y los recortes. El aumento
de la represión es proporcional al recorte que han sufrido nuestras
condiciones de vida, a los ataques salvajes a la sanidad y la educación
públicas, al desmantelamiento de los servicios públicos en general.
Mientras la burguesía y el PP no dejan de llenarse la boca con conceptos
como libertad de expresión y democracia, los trabajadores asistimos a
un ataque sin piedad a nuestros derechos democráticos. La ley Mordaza,
la represión de manifestaciones, las multas y detenciones de activistas o
los juicios a sindicalistas son claros ejemplos de cómo el PP y los
capitalistas de este país quieren callarnos la boca y coartar cualquier
forma de protesta.
Desde El Militante queremos solidarizarnos con Andrés y con los compañeros y
compañeras del Sindicato Andaluz de Trabajadores, así como exigir su
inmediata puesta en libertad sin cargos y la de todos aquellos detenidos
y encarcelados por luchar.