Otra vez el fuego arranca la vida de mujeres. Esta vez no han sido las trabajadoras de una fábrica, sino niñas en un centro de protección de menores. Esta vez el crimen ha sido en Guatemala.
El pasado 8 de marzo, las niñas del centro de menores Hogar Seguro Virgen de la Asunción se amotinaron para denunciar lo que pasaba en este centro de los horrores. Violaciones y abusos de todo tipo. Decidieron amotinarse precisamente el 8 de Marzo, y las han dejado morir quemadas, encerradas. Lee aquí la noticia.
Las niñas son especialmente vulnerables en las instituciones. En todas partes. En el estado español también. Cada vez se conocen más casos de redes de prostitución infantil en torno a centros de protección de menores (Euskadi, Catalunya, Canarias...). Y Save The Children ha denunciado en su informe Infancias Invisibles que las niñas víctimas de trata para explotación sexual están desprotegidas dentro del sistema de protección de menores.
La sociedad no puede seguir mirando para otro lado ante el drama de la infancia en desprotección, especialmente las niñas. El pasado día 8 se dio un gran salto con la huelga de hambre en Sol, los paros estudiantiles y las históricas manifestaciones por la tarde. Pero queda mucho por hacer. Hay que seguir denunciando, movilizando y organizándose.