El domingo 14 de Agosto un grupo de fascistas trató de atacar una caseta de la izquierda en la zona familiar del recinto de la Feria de Málaga. Los nazis, tras pasar con gesto desafiante ante la caseta de Comisiones Obreras, se pararon frente a la caseta de El Militante y comenzaron a lanzar insultos y amenazas como “rojos de mierda”, “os vamos a matar a todos”, “no vamos a dejar ni una de vuestras casetas en pie”, etcétera. Además de las amenazas también sacaron navajas con las que trataron de intimidar a los allí presentes. La actuación pacífica pero decidida de los compañeros del servicio de orden de esta caseta, junto con la ayuda de gente que pasaba frente a la misma, consiguió impedir que el suceso fuera más grave. Esa misma noche la caseta de la Coordinadora de Inmigrantes de Málaga sufrió una agresión similar. En esta ocasión los insultos y las amenazas se dirigieron tanto a los trabajadores inmigrantes allí reunidos, como a los compañeros del 15-M que se encontraban en el interior de la caseta. No podemos consentir estas acciones violentas que no buscan otra cosa que intimidar a los jóvenes y trabajadores para que no nos organicemos política y sindicalmente en defensa de nuestros derechos.
Por desgracia no es la primera vez que se producen agresiones fascistas en la feria de Málaga. En años pasados, otras casetas de organizaciones de izquierdas como la de CGT, el PCE, Juventudes Comunistas o el Sindicato de Estudiantes también sufrieron ataques por parte de grupos nazis. Este tipo de agresiones no son exclusivas de la Feria. Esta primavera por ejemplo, el local de Izquierda Unida fue asaltado por fascistas durante la celebración de un acto público en defensa de la Memoria Histórica. Más recientemente, concretamente el domingo pasado, en Madrid un fascista ultracatólico intentaba asesinar a un veterano militante de izquierdas que cometía el horrible crimen de repartir panfletos en contra de la visita del Papa.
Estas intolerables agresiones, amparadas por partidos políticos neonazis tales como Movimiento Social Republicano o Alianza Nacional, que en numerosas páginas webs afines hacen apología del racismo, la xenofobia y la violencia contra las organizaciones de izquierdas, son una amenaza para la democracia y la clase trabajadora.
La actividad de todos estos grupos se está incrementando en toda Europa en paralelo a la crisis del capitalismo. El aumento del paro, la pobreza y las desigualdades sociales, son esgrimidos demagógicamente por estos grupúsculos para cargar contra los inmigrantes y las organizaciones de izquierdas. Su objetivo es, a través de la intimidación y la violencia, genera un estado de miedo y temor entre el movimiento obrero y juvenil y debilitar así su capacidad de contestación social. Estos elementos que se reivindican herederos políticos de Hitler, Mussolini o Franco, actúan en la práctica de manera impune, inducidos por la extrema derecha que hace surfing en la estela del PP junto con los poderes económicos con un gran poder e influencia para que sus agresiones queden silenciadas.
La defensa contra las actuaciones de las bandas fascistas pasa por la respuesta colectiva del conjunto de la clase trabajadora y la juventud y de sus organizaciones. Por eso, la única fuerza en la que debemos confiar para frenar estas agresiones es mediante la denuncia, la organización y la movilización más masiva y contundente.
Las organizaciones firmantes de este manifiesto nos reafirmamos en nuestras ideas políticas de izquierdas, que defendemos democráticamente, y no vamos a tolerar la violencia contra nuestros afiliados y simpatizantes por defenderlas.
CCOO, UGT, CGT, Sindicato de Estudiantes, Izquierda Unida, PCE, Izquierda Socialista-PSOE, El Militante, Juventudes Comunistas, Coordinadora de Inmigrantes de Málaga