Tras ser absuelta de denuncia falsa por acusar al padre de su hija de abusos sexuales (anteriormente condenado por violencia de género), el calvario judicial prosigue. Será juzgada por desobediencia, por incumplir el régimen de visitas al no entregar a la niña a su maltratador y "presunto" violador, Francisco Javier Muñoz Toribio. Hay que acabar con la justicia patriarcal ¡todas somos Susana y Nayara!
"El jueves día 26 a las 10:30 en los juzgados de Talavera, la fiscalía vuelve a sentarme en el banquillo, pidiendo que me condenen a prisión y dejar a mi hija desamparada, amparando a un depredador sexual de menores y acusándome a mí de desobediencia grave a la autoridad por haber cumplido con mi obligación de madre: proteger a mi hija de ese ser que abusó de mí desde los 13 años en Talavera de la Reina con la complicidad de su mujer y las instituciones talaveranas, hasta casi mis 20 años.
Fruto de esas violaciones nació mi hija Nayara siendo yo aún menor, y lejos de protegerme el sistema me desprotegió. Ese engendro ha tenido visitas con mi hija y abusó de ella!!!!!! Mi único delito ha sido protegerla, sin embargo es a mí a quien sientan en el banquillo ¿Y saben quién es el testigo principal de la fiscalía? ÉL, EL ABUSADOR SEXUAL, increíble sí, pero cierto.
Una vez más, pido apoyo y que se viralice, no sólo para mí una vez más sino para Nayara, que es la que merece ser protegida. Enfrentarme al sistema judicial para protegerla me ha costado mi salud, mi libertad (lo pretenden) y mi caso no es aislado.
FDO: SUSANA GUERRERO.''