Mandamos desde aquí una afectuoso abrazo a todos los que han hecho posible este final, especialmente a los amigos y compañeros de la Fundación Raíces, y sobre todo a Habiba, que con su determinación y coraje ha demostrado, una vez más, que David puede vencer a Goliat.
Noticia en El País
Seguiremos peleando hasta que el engendro burocrático del monopolio tutelar de menores y sus guantánamos privatizados dejen de destrozar vidas. La próxima cita la tenemos el viernes a las 12 frente al IMMF