Ante las declaraciones de Esperanza Aguirre sobre las personas sin hogar, no podemos más que expresar nuestro más profundo rechazo. Es repugnante que se criminalice a los sectores más desprotegidos de la sociedad. Además, se olvida esta aristócrata que ella es la responsable (como presidenta del partido que gobierna Madrid desde 1989) de unos servicios sociales incapaces de abordar eficazmente el sinhogarismo. Porque es mentira que la gente duerma en la calle por voluntad propia. Es mentira que quien duerme en la calle es porque rechaza la ayuda de los servicios sociales: no hay plazas suficientes en los albergues municipales (sólo se garantiza cobijo para todo el que lo solicite cuando se activa la "ola de frío" al caer las temperaturas por debajo de los 0 grados, y sólo durante la noche). El resto del año las personas sin hogar tienen que "buscarse la vida".
El perfil de las personas sin hogar es tan heterogéneo que es imposible generalizar: personas excluídas desde la cuna, ex presos, personas despedidas y posteriormente desahuciadas, trabajadores cuyo sueldo no llega para garantizar un techo, toxicómanos, jóvenes ex tutelados y que quedan en la calle al cumplir los 18 años...En definitiva, personas con diversas problemáticas a los que la Administración intenta ocultar a través de unos servicios sociales "paliativos".
Eso sí, el PP se encarga de que la indigencia ajena sea un buen negocio para las empresas que gestionan los recursos destinados a atender a este sector de la población. ¡Hasta el Samur Social está privatizado! Y también se encargan de reprimir a quien se encuentra en esta situación...¡incluso te multan con 700 euros por buscar comida en la basura! La lógica es criminal: sólo existen las situaciones que la maquinaria de servicios sociales es capaz de procesar (y por tanto beneficiar a la patronal del Tercer Sector), por lo que el resto de realidades se ignoran y se intentan hacer desaparecer. Que afean la ciudad.
Pero no os preocupéis, que cada vez somos más los que pensamos que hace falta limpiar Madrid. Ciertamente la ciudad está cada vez más sucia, como denuncian vecinos y trabajadores de los servicios de limpieza y recogida de basuras. Pero también sabemos que lo primero que hay que limpiar son las instituciones. El 24 de mayo tenemos que echarles. En el caso de Madrid, pedimos el voto por la candidatura de unidad popular Ahora Madrid
Pero con votar no basta. Tenemos que organizarnos en los barrios y reconstruir el tejido social, la solidaridad entre vecinos es la mejor herramienta para luchar contra la pobreza y la exclusión. Organizaciones como la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, la Red de Solidaridad Popular, los Campamentos de la Dignidad...marcan el camino. ¡Y el camino sólo se hace andando!
